sábado, febrero 18, 2012

La calle Grupo Triana en estado vegetativo

Sr. Alcalde de Sevilla y de todos los sevillanos, sé que su valioso tiempo está dirigido a resolver los problemas acuciantes de la ciudad y no nimiedades de un grupo minoritario de seguidores de un estilo musical, como es nuestro caso, para eso están el conjunto de colaboradores en los distintos ámbitos.



Soy presidente de la Asociación Cultural Hijos del Agobio, ya con una trayectoria de dos años y medio de actividades encaminadas a la difusión y desarrollo del Rock Andaluz, entre otras los dos Festivales Hijos del Agobio y la solicitud de la Medalla de Oro de la Ciudad de Sevilla para el grupo Triana, que fue concedida con el apoyo unánime del pleno de la anterior corporación de la que Ud. formaba parte.

En el año 2.010 solicitamos el nombre de una calle, tal vez no era la más idónea, pero estaba libre de nomenclatura algo difícil en esta Sevilla nuestra, para ese mismo grupo Triana que se aprobó en pleno del Distrito Macarena en noviembre de ese mismo año. La calle en cuestión es una calle sin números, por lo que la afectación a los vecinos era insignificante, ni se basaba en la denostada en Sevilla y sus calles Ley de Memoria Histórica, no había motivación política alguna, sólo el mínimo reconocimiento de su ciudad a un grupo que llevó el nombre de la misma y su idiosincrasia callejera por todo el mundo.

Cierto que no exaltaba la Sevilla de cera y farolillo, ni la monumental y mariana, pero sí la Sevilla cotidiana de los sevillanos, de rincones y tertulias de amigos, de amores y ambientes costumbristas, la Sevilla de sus gentes y vivencias.

A lo que iba, con las elecciones municipales en puertas se paralizó todo el proceso encaminado a la aprobación por el pleno del Ayuntamiento de la concesión de la calle, su posterior rotulación e incluso la realización de un mural conmemorativo y una serie de contactos con diversos grupos musicales para realizar un homenaje adecuado a la importancia del acto. En dichas elecciones su partido salió ganador y ud. Alcalde, después de un tiempo prudencial, a partir de septiembre de 2011 intentamos retomar las conversaciones con el Distrito Macarena, ante la paralización del procedimiento en el Servicio de Estadística, hasta conseguir una fecha para reunirnos, pero tres horas antes de dicha reunión, se canceló telefónicamente con un lacónico "la cosa está difícil", gran educación en las formas, gran elocuencia en la explicación.

En su Caralibro el 31 de enero de este año, días después de esa reunión cancelada, a interpelación de un compañero de junta de esta asociación, ud. le respondió con un revanchista "fue aprobada por la anterior corporación municipal, ¿no? La solución más acertada sería que te pasaras por la sede del Distrito Macarena y te informen de cómo van los trámites". ¿Desconocimiento?, ¿capoteo sevillano?, ¿respeto? En fin, "por sus frutos lo conoceréis", qué gran enseñanza.

Mal Sr. Alcalde, basta ya de trasnochadas venganzas partidistas que afectan al normal desarrollo de las instituciones democráticamente constituidas, como son los Distritos Municipales, y los mandatos derivados de su Junta y anotados en sus Actas, inste a la elevación al Pleno del Ayuntamiento de la propuesta aprobada y una vez allí voten a favor o en contra, retrátense con sus argumentos en una u otra posición y no agache la testuz bajo el ala incauta de "fueron los otros".

No todo son Ikeas, torres Pelli, talleres de distritos o merecidos ajusticiamientos de los rótulos de la Pilar Bardem de turno, hay nimiedades donde también se puede lucir una perfecta sonrisa o una impecable mueca de desagrado ante el cumplimiento de un mandato democrático.