domingo, septiembre 11, 2011

El retrato del Sr. Troncoso

Hace algunos meses relaté la semblanza y vida del Sr. Troncoso (ver la entrada en este mismo Blog pinchando aquí) personaje real que inspiró el tema a Jesús de la Rosa. Ese recorrido faltaba completarlo con la imagen del protagonista.





Leopoldo Troncoso Narváez en 1957, el día de su boda.



Hoy esa imagen os la ofrezco, esa cara que plasmó Jesús "...en tus labios brilla una sonrisa, que penetra en lo más hondo de mi ser...", la sonrisa del que no tiene más que ofrecer, el agradecimiento de quien habla a un mundo sordo y descubre el alma sensible que es capaz de escucharlo y, si acaso, entenderlo, divagaciones al éter sobre la vida propia tamizadas por el crisol de una botella verde, como dicen que es la esperanza, recogidas en el recipiente de la genialidad "...en tu mente ya lo pone, todo tal como ha de ser..."





Leopoldo en 1.983, fotografía de su D.N.I.



Un homenaje a la vida, quizás a la supervivencia instintiva, de quien en su avance fue dando tumbos señalando objetivos y fracasando en su conquista, hasta que un buen hombre se sentó a su lado y le dijo bien alto "...Sigue luchando y podrás lograr al fin tu ser...", la inmortalidad que todos tenemos y sólo los elegidos saben ver.


P.D.:Fotografías aportadas por Dª. Rosario Troncoso Narváez, hermana de Leopoldo, y su sobrino D. Manuel Troncoso Vázquez.